La Fraternidad Misioneros del Buen Samaritano lleva la presencia de Cristo a cada comunidad
procesiones
Fiestas religiosas que fortalecen la unidad y la devoción del pueblo de Dios.
Las fiestas religiosas o patronales son momentos de encuentro, alegría y renovación espiritual. En ellas, la comunidad se une para honrar a Dios, a la Virgen María y a los santos patronos, expresando su fe a través de la oración, la liturgia y la fraternidad. Cada celebración es una oportunidad para fortalecer la unidad, compartir el amor y vivir la fe con gozo, esperanza y compromiso misionero.
tradición cristiana
La Fiesta de la Virgen del Carmen
Entre las celebraciones más queridas está la Fiesta de la Virgen del Carmen, madre y protectora del pueblo creyente. Ella nos enseña a caminar con confianza bajo su manto de amor, recordándonos que quien lleva su escapulario está unido a Cristo y llamado a vivir en gracia. En esta fiesta, la Fraternidad Misioneros del Buen Samaritano acompaña a las comunidades con eucaristías, procesiones, rosarios y actos de consagración, fortaleciendo la devoción mariana y la fe popular.
“Proclama mi alma la grandeza del Señor, y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador.”
— Lucas 1, 46-47
celebración mariana
Un homenaje de amor y gratitud a nuestra Madre protectora.
Cada fiesta patronal es una expresión viva de la misión samaritana: llevar la presencia de Dios a donde el pueblo vive, trabaja y celebra. A través de estas festividades, la fraternidad evangeliza con alegría, fomenta la oración comunitaria y renueva el espíritu de servicio. Así, la celebración se convierte en testimonio del amor de Cristo que une corazones, sana heridas y fortalece la esperanza.
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